En conmemoración del Día Internacional de la Mujer, el 8 de marzo se llevó a cabo una pasarela que celebró la fuerza, la diversidad y la libertad de expresión. Los modelos en formación de Top Runway México abrieron el desfile con una propuesta visual armoniosa: caminaron en pareja, proyectando una sincronía natural que cautivó desde el primer momento. Lucieron atuendos de corte casual que, más allá de la estética, revelaban contrastes y afinidades, permitiendo a cada dúo expresar su identidad individual dentro de una composición colectiva. Una apertura dinámica que marcó el tono de una jornada dedicada al arte, el estilo y el empoderamiento. 

Tras esta apertura vibrante, la pasarela continuó con una selección de prendas de diseñador que elevaron el nivel creativo del evento. Las propuestas de Ivette Lozano y Copinalli tomaron el escenario, cada una con una visión distintiva que enriqueció la narrativa visual de la jornada. Ivette, fiel a su lenguaje textil, apostó por siluetas sofisticadas con acentos contemporáneos, mientras que Copinalli destacó por su sensibilidad artesanal y su enfoque versátil, proponiendo piezas que fusionaban elegancia y libertad creativa.